Reapertura el 4 de abril de 2025
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Collioure, ciudad portuaria del Mediterráneo, ofrece un ambiente único, tanto de día como de noche. Un recorrido por sus calles adoquinadas, una degustación en una buena bodega, un paseo por el puerto, el descubrimiento de buenos productos en un mercado tradicional, los colores y las fragancias inconfundibles y lo típico de un hotel en Languedoc-Roussillon: ¡el descubrimiento del auténtico sur!
Alojarse en el Mas des Citronniers, su hotel en Collioure (enlace hacia la página del hotel) es igualmente disfrutar de un rico patrimonio. La ciudad está atravesada por la historia y ofrece un ambiente único: el Castillo real era uno de los lugares de vacaciones de los reyes de España. Más arriba, el Fuerte San Telmo, que data del siglo XV y que fue reformado más tarde por Vauban, abriga un museo del Renacimiento, además de ofrecer unas vistas excepcionales sobre la ciudad, el mar y toda la costa. ¡Todo ello a unos pasos de su hotel a orillas del Mediterraneo!
Enamorados de la luz única que baña la ciudad, los iniciadores del fauvismo eligieron Collioure para residir y crear grandes obras: Matisse, Derain, Terrus, Maillol… Su presencia impregna la ciudad. Galerías de pintura y de arte hacen perdurar esta herencia y aportan esta faceta artística a Collioure, confiriéndole un renombre mundial.
El sur catalán es una zona geográfica preservada que ha sabido conservar su naturaleza y su marco de vida. Del mar (costa rocosa o arenosa) a la montaña y los contrafuertes de los Pirineos, la región ofrece variedad de paisajes y vistas excepcionales además de numerosas posibilidades de excursiones a pie, en bici o a caballo. Saliendo de Collioure podrá descubrir especialmente el camino de los aduaneros, el sendero del litoral, las calas…
La tradición vitícola es secular en los Pirineos Orientales. No hay una ruta o un camino que no lleve a una propiedad, un productor, una tradición. En todas partes podrá visitar propiedades, degustar vinos tintos robustos, rosados ligeros o vinos suaves y dialogar con viticultores apasionados. Una ocasión para iniciarse a uno de los pilares de la cultura mediterránea.
Los aficionados a la acción encontrarán lo que buscan en los alrededores de Collioure y en los Pirineos Orientales. Excursiones y paseos, BTT… En deportes de agua: windsurf, paddle, kite surf, jetski en verano, submarinismo o, simplemente, disfrutar de la playa de Collioure. Y si su estancia es en invierno, podrá disfrutar del placer del esquí, de los deportes de deslizamiento o de excursiones…
Actividades que reúnen a la familia
En vacaciones, los pequeños también tienen derecho a hacer descubrimientos o a pasar a la acción.
Sentir sensaciones fuertes en un parque acuático o un recorrido de acrobranche (circuitos por los árboles).
Ir al contacto con los animales (Valle de las Tortugas, Reserva de Sigean).
¡El departamento es kids-friendly!
La situación excepcional de los Pirineos Orientales asegura el éxito de las vacaciones, verano como invierno: 214 km de costa (arena fina o calas rocosas), 300 días de soleamiento al año, una costa y un interior rico en cultura y buenos productos. Y a menos de 30 minutos del hotel, la frontera española. ¡Siempre hay algo que hacer en el país catalán!
